Ametlla de Mar

L’Ametlla de Mar tiene un notable puerto donde se concentran las actividades pesqueras de la zona, combinadas con las de tipo deportivo que ofrece su dársena. Es singular la franja de arena que se extiende delante del puerto natural de l’Estany Gros, antiguamente utilizado por los pescadores.
Las largas playas tan habituales en la Costa Daurada tienen una excepción notable entre L’Ametlla de Mar y el Puerto de Calafat, en 4 Kilometros de costa rocosa y recortada, de gran belleza y pequeñas calas de arena fina.

Ruta que podemos realizar desde l’Atmella:

Siguiendo la  carretera N-340 llegaremos a el Perelló, donde se encuentran muy bien conservados, restos de la antigua vía romana. Esta población es el punto de salida para acceder a los interesantes vestigios arqueológicos y poblados prehistóricos situados a cada lado del río Ebro. Por una parte, a la cueva con pinturas rupestres de Cabra-freixet, en la sierra del Boix, o a la cueva Meravelles, de caprichosas formaciones, en Benifallet, y por otra, a la población de Pinell de Brai para contemplar su bodega modernista decorada con un friso de cerámica del pintor novecentista Xavier Nogués. Después se llega a Gandesa donde además de otra bodega, también de Martinell, es importante el pórtico románico de la iglesia y, si se desea descansar un poco, no muy lejos y entre silvestres angostamientos se encuentra el santuario de la Fontcalda.